El día de vuestra boda es uno de los más importantes de vuestra vida, sobre todo porque, en principio, sólo ocurrirá una vez. Muchas parejas si preguntan si el vídeo de boda es necesario o si, por el contrario, es algo que se puede eliminar del presupuesto. No sería lógico que nosotros, que nos dedicamos a producir vídeos de boda, dijéramos que es elemento del que se puede prescindir y, por eso, os vamos a explicar qué opinamos sobre los vídeos de boda y por qué creemos que son tan necesarios.
Para empezar, es un recuerdo tremendamente especial porque son imágenes en movimiento. Esto resulta una obviedad -ya que hablamos de vídeo-, pero pensadlo bien. En vuestra película quedarán retratadas para siempre las miradas cómplices, las sonrisas, los gestos… Esos momentos de emoción que el paso del tiempo irá diluyendo. Si además grabamos sonido directo y podemos escuchar vuestros votos, el sí, quiero o esa frase graciosa fruto de los nervios, creemos que contemplar el vídeo como algo indispensable en una boda queda más que justificado.
Aunque este post podría acabar aquí, vamos un poco más allá. ¿Qué os parece si a todo esto le añadimos una entrevista previa el mismo día del enlace? Podréis ver cómo sentisteis ese día, qué frases escogisteis para explicar vuestras emociones y recordar vuestra voz. En nuestro caso, también ofrecemos la opción de contar con un pequeño confesionario, donde todos los invitados podrán dejar un mensaje de felicitación y buenos deseos. Por lo general, la pareja no sabe nada de lo que se dice allí, así que, cuando ve el resultado final, la sorpresa y la emoción están aseguradas.
Si al llegar hasta aquí os habéis dado cuenta de la importancia que tiene el vídeo en el día de vuestra boda, sólo os daremos un último consejo: contad con profesionales. Hay muchas empresas que se dedican a hacer vídeos de boda. Buscad, comparad y encontrad el estilo que más se ajuste a vuestras expectativas/necesidades. No dejéis una responsabilidad tan grande, como es filmar el día de vuestra boda, a aficionados. Os podéis llevar una gran e irreparable decepción. Así que, no paréis hasta dar con los profesionales más adecuados para vosotros y, sobre todo, reservad con antelación.